jueves, 24 de septiembre de 2009

JUEGOS CHILENOS

JUEGOS CHILENOS

Nadie sabe en qué momento de la historia de la humanidad el hombre comenzó a jugar. Pero sabemos con certeza que muchos de los juegos que aún se efectúan, casi sin transformaciones, tienen miles de años.

Aquí podrás conocer los juegos que a lo largo de la Historia han sido compañeros de entretención de los chilenos.

La función de los juegos a lo largo de nuestra historia ha sido intensamente estudiada por la disciplina del folclore por la gran relevancia que tiene en los sistemas culturales de localidades específicas y su fuerte tradición comunitaria y nacionalista.

A continuación presentamos los principales juegos que se identifican con la cultura de Chile:

EL TROMPO


Un cuerpo cónico de madera, una púa de metal en la punta y una cuerda que se enrolla en ella, componen al trompo, figura que ha sido protagonista de muchas horas de entretención y festividades en la vida criolla.
Girar, bailar y hacer piruetas en el suelo es la misión de esta figura que, una vez lanzada por su dueño, debe enfrentarse a las amenazas de otros trompos danzarines que intentarán derribarlo.

Pero hay muchas otras maneras de divertirse con el trompo, sin tener que competir con otros de su especie. Entre ellas, se encuentra la modalidad de hacerlo bailar y luego, con ayuda de la cuerda, subirlo en forma de ?copita? hacia la mano para que termine su danza en la palma de al mano. De esta modalidad surgieron los siguientes términos: Trompo ?sedita?: es el que se siente suavecito cuando baila en la mano. El otro es el trompo ?cucarro? que por tener la púa torcida o desnivelada baila ásperamente sobre la mano.

Las cuerdas se conocen en Chile con diferentes nombres: guaraca, soga, soguilla, cochaillo, lienza.
Su Origen
El origen del trompo es muy antiguo. Ya es citado en la literatura de Virgilio en su obra ?Eneida? y algunos poetas romanos confesaban que tenían más afición al trompo que a los estudios.

Inicialmente en Chile, los trompos se hacían de madera de espino con el fin de que fueran muy resistentes para soportar los ?quiños? o golpes que reciben de sus adversarios. Hoy se han masificado y su fabricación se hace con diferentes tipos de maderas y también se les ve de múltiples colores.

Fuente: Folclor Chileno, Oreste Plath.

CORRE EL ANILLO


Según la estudiosa peruana, Emilia Romero, este juego se originó en Francia, en donde es conocido como "le furet".
En Italia fue un juego de gran popularidad por los siglos XVI y XVII y desde allí pasó a España desde donde derivó a América.
En nuestro país aún se juega, aunque ya no es tan popular como lo fue hasta hace algunos años.

Los niños que lo juegan se sientan en línea o semicírculo con sus manos juntas y semiabiertas. El que ha sido elegido previamente encierra entre sus manos un anillo o una moneda. Luego va pasando las manos, con el objeto dentro, por entre las manos de los jugadores que esperan ser depositarios. Mientras simula echar la prenda en las manos de cada uno de los jugadores, va recitando:
Corre el anillo por un portillo,
pasó un chiquillo comiendo huesillos,
a todos les dio menos a mí.
Corre el anillo por un portillo.
Cayó una teja mató a una vieja,
cayó un martillo, mató a un chiquillo,
cayó un ratón
mató a un guatón,
cayó una horquilla
pinchó a una chiquilla,
cayó una tagua, aplastó a una guagua
cayó una rama de matico,
aplastó a un milico.

Variaciones del mismo juego hay muchas como:

Al corre el anillo por un portillo,
pasó un chiquillo corriendo huesillos,
a todos les dio menos a mí;
me fui a mi casita y me puse a llorar.
llegó mi taitita y me dio un pesito y me hizo callar.
Eche prenda señorita o caballero.
Cuando termina de recitar, aquél al cual se le pregunta ¿quién tiene la prenda? Debe adivinar el nombre del que la recibió. Si acierta, pasa a ocupar el puesto de aquel que preguntó y éste debe entregar una prenda. Si no adivina, la prenda tiene que echarla él.

Cuando se ha reunido una cantidad suficiente de prendas (zapato, chaleca, aro, bufanda, reloj, etc.) se inicia la segunda parte del juego. Esta consiste en recuperar la prenda, para lo cual hay que hacer una penitencia, la que es fijada por el grupo previo acuerdo. Para notificar la sentencia, quien está dirigiendo el juego dice:

•De quién es esta prenda?
•Mía, responde el dueño.
•¿En qué juego la perdió?
•En el corre el anillo, dice el penitente.
•¿La quiere recuperar?
•Sí, responde el dueño.
•Entonces debe cumplir penitencia.
En este punto se le comunica la penitencia al dueño de la prenda y este debe ejecutarla para poder recuperarla.
La variedad de letras que existen en Chile para recitar este juego folclórico se debe a agregados u omisiones espontáneas de quienes juegan.

LA PAYAYA


Mejor conocido como Pallalla o Payana. Juego casero consistente en equilibrar cierta cantidad de piedras en la palma extendida de la mano. La idea es lanzar las piedrecillas verticalmente con la palma al cielo extendida en posición horizontal y, mientras dura su trayectoria, invertir la orientación de la palma para recibirlas. El juego va aumentando su dificultad como lo es desde tirar las 5 piedras al suelo, seleccionar una, tirarla hacia arriba y cuando va en el aire tomar una piedra del suelo y recibir la que viene cayendo del aire, para luego en otra etapa tirar una piedra al aire y recoger dos o tres del suelo. Tiene muchas etapas o pruebas que cada vez se van complicando, es muy entretenido para chicos y grandes.

En Chile, el nombre de este juego se usa muchas veces para ejemplificar una actividad inútil u ociosa.

Ejemplo: Ese hombre es bueno para la pallalla

PALO ENCEBADO


Este juego consiste en un palo o vara de 20 centímetros de diámetro y de 5 a 6 metros de alto que se encuentra enterrado en tierra. El palo untado en grasa deberá ser trepado para alanzar el premio que está en la cima.
El objetivo es subir, resbalando una y otra vez hasta que uno de los competidores logra atrapar el premio que puede consistir en dinero o alimentos.
Su origen viene de Nápoles, Italia, durante los siglos XVI y XVII. Se practicaba en las fiestas populares y se conoció con el nombre de cucaña. En la plaza principal del pueblo se imitaba una montaña que representaba el Vesubio. "Del cráter salían explosiones de salchichones y distintos manjares especialmente macarrones los que, al desprenderse, se cubrían de queso rayado, cubriendo la montaña a manera de cenizas. La gente acudía para apoderarse de aquellos alimentos. Después se sustituyó la montaña por un alto poste desde cuya cima pendían los salchichones, aves, etc".

ELEVAR VOLANTINES

Encumbrar Volantines
Con la llegada de la primavera nuestros cielos le dan la bienvenida a la llegada de miles de volantines de distintos colores, formas y tamaños que inician su temporada de juego.
Septiembre es el mes ideal para encumbrar a estos personajes de papel, pues el viento de primavera es el óptimo para dar vida a las piruetas y danzas aéreas.

El origen del volantín es muy antiguo. Se atribuye a un general chino de nombre Han Sin, en el año 200 antes de Cristo, y su difusión fue tan popular en Oriente que el calendario chino le dedicó el noveno mes del año. En Europa, empezó a hacerse conocido en el siglo XVII y su aparición en Chile data de mediados del siglo XVIII. Su llegada conquistó a tantos seguidores, que se convirtió en el protagonista de muchas fiestas, juegos, competencias, reuniones y jaranas criollas.

Pero su presencia también causó disturbios y peleas. De hecho, en 1795 se dictó una orden que condenaba a seis días de prisión a todo "malvado" que causara daños como consecuencia de la encumbrada de un volantín. Esta medida se tuvo que adoptar porque fueron demasiados los peatones que sufrieron el golpe de una teja por culpa de las piruetas de un volantín. Pese a esto, su presencia se hizo indispensable en la celebración de las Fiestas Patrias, donde destacaban las famosas competencias de corridas de volantines. Estas últimas consisten en la lucha de dos o más figuras de papel en el cielo, que buscan eliminarse unas a otras por medio del roce violento del hilo curado. Esta ?arma? es consecuencia de la mezcla de vidrio molido con pegatina en el hilo que encumbra al volantín y que es capaz de cortar los hilos enemigos.

Con los años, se prohibió el uso del hilo curado y los volantines se dedicaron a cubrir los cielos con fines lúdicos y no competitivos estando en manos principalmente de los niños.

Sin embargo, y pese a todas las campañas de prevención y advertencia en contra del hilo curado, persisten hoy en día algunos fanáticos que lo siguen usando causando daños a los menores. Son numerosos los niños que han sufrido cortes y heridas producto de ese peligroso material.

Actualmente, el volantín ha experimentado las innovaciones de la modernidad, ya que sus variedades se presentan en papel, plástico y con sofisticados sistemas de manejo que posibilitan dirigirlo con dos manos.

Fuente: Folclor Chileno, Oreste Plath

LA RAYUELA

La rayuela o tejo es un juego típico de las zonas campesinas de Chile, practicado desde la época de la Colonia y notoriamente distinto de un juego infantil que también se llama "rayuela". En el suelo se coloca una lienza de color blanco, tensada. El jugador se ubica a una distancia determinada y lanza un tejo, que debe caer justo en la lienza. Se obtiene el mayor puntaje si el tejo cae sobre la lienza y menos puntos mientras más alejado de ella.

La plataforma o base donde viajan los tejos esta compuesta por un cajón de medidas aproximadas a 1 m de ancho por 80 cm de largo y 20 cm de alto, y en su interior se llena con barro o arcilla, la idea es que el interior de la plataforma sea una especie de colchón donde los tejos caigan y queden enterrados en ella. Si tenemos una plataforma de 1 m de ancho debe también haber un hilo que puede ser de cáñamo por su resistencia, el cual debe cruzar la plataforma por el centro, o sea, si el largo es de 80 cm el cáñamo debe cruzar a 40 cm.

Los tejos que se ocupan deben ser de metal y tienen que tener una forma cilíndrica como una moneda pero mucho más grande que éstas, para los aficionados a este juego se ocupan tejos que no sobrepasan su peso a 800 g. Los que practican este juego como deporte ocupan tejos de acero que sobrepasan su peso a 1500 g por lo tanto al ser de este peso, el tejo no crece hacia los lados sino que hacia arriba y queda como la forma de una taza. Los competidores profesionales lanzan el tejo desde 12 m de distancia de la plataforma

La mayoría de las veces la rayuela se juega en equipos. Los puntajes son variables, pero gana el equipo que más veces haya lanzado el tejo más cerca del hilo que cruza la plataforma. El jugador que lanza su tejo y cae sobre el hilo tiene doble puntaje en esa jugada según el valor que le hayan dado a las lanzadas.